Declaración de los Derechos Campesinos
Abusos de Nestlé
Villalobos y Albores mienten
Migrantes cafetaleros.
Denuncia ante la SCJN.
La Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales, firmada por México a finales de 2018, obliga al Estado mexicano a garantizar el derecho a una alimentación saludable y culturalmente apropiada, producida mediante métodos ecológicamente racionales y sostenibles, y el derecho a definir sus propios sistemas de alimentación y agricultura, sin semillas transgénicas, sin agroquímicos, sin prácticas monopólicas, sin acaparamiento de tierra y lo obliga a luchar contra el cambio climático, lo que establece un muro legal contra el acuerdo de explotación de los campesinos y de la tierra entre el gobierno neoliberal de México y la empresa esclavista Nestlé para la producción del café.
Los Declaración establece en su artículo 5to.:
1. Los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales tienen derecho a acceder a los recursos naturales presentes en su comunidad y necesarios para gozar de condiciones de vida adecuadas, y a utilizar dichos recursos. Tienen derecho a participar en la gestión de estos recursos y a disfrutar de los beneficios de su desarrollo y conservación en su comunidad.
2. Los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales tienen derecho a determinar y a elaborar prioridades y estrategias para ejercer su derecho al desarrollo.
3. Los Estados adoptarán medidas para garantizar que se permita toda forma de explotación de los recursos naturales que los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales mantengan o empleen tradicionalmente, para lo cual se basarán en:
a) Una evaluación del impacto social y ambiental debidamente realizada por entidades independientes y con capacidad técnica, con la participación individual y colectiva de los campesinos y de otras personas que trabajan en las zonas rurales;
b) Consultas celebradas de buena fe para obtener el consentimiento libre, previo e informado de los campesinos y de otras personas que trabajan en las zonas rurales;
c) Modalidades de participación en los beneficios de esa explotación, establecidas en condiciones mutuamente acordadas entre quienes explotan esos recursos naturales y los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales.
Nestlé pretende devastar 150 mil hectáreas de Veracruz en donde sembraría café Robusta para surtir a sus plantas de producción en todo el país y más, porque del total del producto que generaría sólo utilizaría en México 10% por lo que estaría exportando 90% del producto, la semilla que usa es transgénica, usa agroquímicos y establece una relación de amo-esclavo con sus productores a los que les paga únicamente 6 pesos por kilogramo y lo vende envasado y rebajado al 10% con sub-productos químicos y conservadores con un precio comercial de 337 pesos el kilogramo promedio. La especie Robusta que usa Nestlé es la peor que existe en el mercado y a diferencia de la especie Arábica de gran calidad que se siembra en el país, no necesita sombra, por lo que en la tierra donde se siembra la deforesta y la agota y extingue cualquier especie y vida de esa tierra, además de ser Nestlé una empresa criminal con miles de demandas en todo el mundo que van desde demandas por el despojo del agua del subsuelo hasta por esclavizar niños en sus plantaciones. En México ya enfrenta demandas por despido de más 200 trabajadores, por despojo del agua de los volcanes Popocatépetl e Iztaccihuatl y por despojar a las culturas originarias de Oaxaca, Chiapas e Hidalgo de su patrimonio cultural.
El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Villalobos, y la secretaria de Bienestar, María Luisa Albores, en reunión con los caficultores el 24 de enero pasado aseguraron que no se usarían recursos federales para apoyar a la trasnacional, pero en la realidad el gobierno federal está empeñado en facilitar a como dé lugar el camino para que la empresa esclavista se apodere del agua y el territorio mexicano. El secretario de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca del Estado de Veracruz, Eduardo Cadena Cerón, en entrevista con La Jornada, dijo: “El plan de Nestlé incluye varias etapas; una de ellas tiene que ver con las adecuaciones legales (ya presentaron al Congreso las modificaciones a Ley del Café en Veracruz) Cuando Nestlé nos diga que podemos empezar, lo haremos; la producción de café Robusta se lleva dos o tres años, entonces necesitamos empezar cuando antes para tener un buen nivel de producción de las plantaciones, se les va a dar apoyo para que siembren las plantas; los campesinos interesados vendrán con sus escrituras de parcelas, y se les va a dar cierta cantidad de café Robusta por hectárea. También les vamos a dar su paquete tecnológico: fertilizante, fungicida y la asesoría técnica, para tener la producción que requiere Nestlé.” Y la federación pretende crear a modo el Instituto Nacional del Café para que sea manejada por la trasnacional.
Por otro lado, la reciente oleada de caravanas migrantes que han llegado a nuestro país a los que se les da permiso de trabajo se les está considerando para que engrosen las filas de trabajadores para Nestlé en México, es de conocimiento público que Javier Castañeda Monter (buscador de obreros para Nestlé) es invitado por el Instituto Nacional de Migración para convencer a los migrantes de que acepten trabajos de maquila para la empresa ofreciéndoles empleos de “hasta 5 mil pesos mensuales”
En conferencia de prensa este 4 de febrero de 2019 en Xalapa, Veracruz, lo caficultores mexicanos organizados manifestaron que el principal problema que tienen son los precios tan bajos que se les paga por el producto, el poco apoyo del gobierno y el desprestigio al café nacional que significa la invasión Nestlé a los campos mexicanos, exigen al gobierno federal que de acuerdo con la Declaración Universal de los Derechos Campesinos se haga primero una evaluación del impacto social y ambiental debidamente realizada por entidades independientes y con capacidad técnica, con la participación individual y colectiva de los campesinos y de otras personas que trabajan en las zonas rurales; se hagan consultas celebradas de buena fe para obtener el consentimiento libre, previo e informado de los campesinos y de otras personas que trabajan en las zonas rurales; y que establezcan las modalidades de participación en los beneficios de esa explotación, establecidas en condiciones mutuamente acordadas entre quienes explotan esos recursos naturales y los campesinos.
Denunciaron que las pérdidas por el ingreso de Nestlé a Veracruz serán de 7 mil 500 mdp para productores de café arábigo y criollo, por lo que se trata de defender su vida y el futuro de sus familias. Piden firmas de apoyo aquí: https://fairworldproject.salsalabs.org/oppose-nestles-agribusiness-expansion/index.html .
Y en caso de no hacerlo se podría demandar ante la SCJN e instancias internacionales para garantizar el ejercicio pleno de sus derechos. Pero los cafetaleros no pierden la esperanza de que el Presidente de la República hable con ellos y cumpla lo que les prometió en campaña, cuando les dijo que el café mexicano volvería a alcanzar su esplendor, y prometió apoyar específicamente la producción de la especie Arábica el mismo día en que los cafetaleros se comprometieron a cuidar los votos para que el ahora presidente ganara. Ellos cumplieron ¿y AMLO?
La vida es una construcción consciente.
Iván Uranga