
José Reyes Doria
Los grandes generales de la historia, otorgaban una relevancia estratégica al lugar donde se librarían las guerras. El escenario físico debía ser aquel que garantizara ventajas iniciales, comunicaciones, maniobras, abastecimiento, desplazamiento de las reservas, asistencia de aliados. Poder elegir el lugar representa la mitad de la victoria. Cuando las circunstancias o los enemigos imponen la sede de las hostilidades, la victoria se compromete, las ventajas se desvanecen, los aliados vacilan y, a menos que cuentes con la genialidad de Julio César o Napoleón, estás más cerca de perder que de ganar.
Para la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, el peor lugar para librar la batalla interna por la Presidencia de la República es el Metro. Claudia no escogió el Metro como teatro de la batalla por el 2024, y sus reacciones a este desafío muestran que no lo esperaba. Veamos:
LÓPEZ OBRADOR ES EL GRAN ELECTOR. Pocos dudan que el presidente López Obrador será quien elija al candidato presidencial de Morena. Todos los presidentes, desde Álvaro Obregón, lo han intentado, incluso a sangre y fuego. Más allá de encuestas, negociaciones o trayectorias, AMLO hará la designación en función de su proyecto. Dado el posicionamiento político de AMLO-Morena, aparentemente arrollador en el terreno electoral, podemos decir que el candidato que designe López Obrador casi seguro será el próximo Presidente o Presidenta. Cabe reiterar el “casi”: nada es seguro, las sorpresas o los errores no se pueden controlar absolutamente. Como sea, es claro que López Obrador ya eligió a Claudia Sheinbaum como su sucesora en Palacio Nacional.
DESAFÍO AL PRESIDENTE. Por un momento asumamos que es cierta, o al menos parcialmente cierta, la teoría del sabotaje como causa de los accidentes fatales en el Metro. En este caso, el sabotaje tendría la clara intención de descarrilar el tren que llevaría a Claudia a Palacio Nacional. Destruir la imagen de la Jefa de Gobierno, acusarla de ineptitud y negligencia criminal, serían los objetivos del sabotaje. Eso es un abierto desafío al presidente López Obrador, en tanto Claudia es su delfín para el 2024. A pesar del poder que aglutina AMLO, quienes sabotean a su favorita consideran que pueden dinamitar ese proyecto, sin reparar en medios, sin amedrentarse por los riesgos que conlleva enfrentarse al poder y la furia de López Obrador.
EL DESAFÍO VIENE DEL INTERIOR DE LA 4T. El sabotaje, o viene de dentro o de fuera de la llamada Cuarta Transformación. Para meterse hasta las tripas del Metro y orquestar ese nivel y esa dosificación de sabotajes, burlando a la Guardia Nacional y a la policía capitalina, parecería que los perpetradores son de la familia 4T, pues solo desde dentro se podría contar con información y colaboraciones específicas para penetrar hasta el tuétano el sistema Metro. Pero, en esta hipótesis, ¿quiénes son los saboteadores? No se sabe aún, y tal vez nunca se sepa públicamente. Pero en el sano ejercicio de la especulación, ese papel podrían desempeñarlo los equipos de los otros aspirantes presidenciales del oficialismo, o grupos políticos desplazados, o trabajadores ignorados, o grupos burocráticos amenazados, o intereses económicos poderosos que quieren condicionar la sucesión, todos dentro de la gran familia transformadora.
LOS SABOTEADORES PUEDEN SER DE AFUERA. Sí, también pueden ser los enemigos de AMLO externos a la 4T. Aunque es menos probable, pues la oposición política está sumamente debilitada, no tiene fuerza, no tiene posiciones de gobierno importantes, no tiene recursos suficientes; en suma, la oposición está tan reducida y desarticulada, que difícilmente podrían desplegar un sabotaje tan sofisticado como el que supuestamente ocurre en el Metro, y en todo caso los atraparían fácilmente. En cuanto a los empresarios machuchones, que podrían financiar el sabotaje, tampoco son probables autores, pues en general están muy contentos con la llamada 4T; el modelo económico neoliberal no se ha tocado ni con el pétalo de una rosa y estos días Oxfam informa que los ricos más ricos vieron crecer hasta 42% sus fortunas a partir de 2019: es decir, salvo algún riquillo intoxicado de odio como Claudio X González, el gran capital está a gusto con AMLO. Por su parte, al crimen organizado, al parecer, nunca le han interesado estrategias como la del sabotaje al Metro. Por lo tanto, si se trata realmente de sabotaje, lo más probable es que sea fuego amigo oficialista.
AMLO Y CLAUDIA ACEPTAN EL METRO COMO CAMPO DE BATALLA. A pesar del presunto sabotaje, el Presidente y la Jefa de Gobierno pudieron optar por trasladar la batalla a otro escenario donde la candidatura presidencial no quedara tan expuesta y donde los saboteadores tuvieran que abrir su juego. Pero se envalentonaron y aceptaron el Metro como teatro de la guerra de posiciones. Seguros de ganar, elevaron la apuesta desplegando a la Guardia Nacional, no para frenar de tajo los sabotajes, sino para enviar el mensaje de que en cualquier terreno tienen la fuerza suficiente para imponer su proyecto y sus decisiones. ¿En el Metro quieren, en el Metro sienten que pueden ganarnos? En el metro será. Después de 15 días del despliegue de la Guardia Nacional, los incidentes siguen ocurriendo con pasmosa puntualidad. La moneda de la batalla está en el aire.
ES MEJOR UN ÚLTIMO ACTO DE ESTADISTA. La militarización del Metro está abriendo una caja de Pandora para AMLO-Claudia que solo puede traer desgaste y riesgos. Si dicen que es sabotaje, ¿por qué no lo impiden y castigan a los saboteadores? Cada día que pasa con accidentes y sin atrapar a los malosos, se deteriora la imagen política de Claudia, pues con su ineficacia pone en riesgo la vida de millones de usuarios. Según una encuesta de El Financiero, el 83% de la gente no cree que los accidentes ocurran por sabotaje, sino por la falta de mantenimiento: entonces, si Claudia tiene tamaños para ser Presidenta, debe dar un golpe de timón y comprobar ya el sabotaje atrapando a un pez muy gordo, o bien, anunciar que va a triplicar el mantenimiento del Metro para garantizar la integridad de los usuarios; si no hace una cosa ni otra, día con día quedará como una política sin capacidad ni voluntad, a merced de sus adversarios dentro y fuera de la 4T.
EL METRO PUEDE SER SU WATERLOO. Alguna vez AMLO dijo que, el PRI en su época de oro podía hacer que una vaca ganara las elecciones. Así era, con obvios límites. En la actual coyuntura política, el dominio que ejerce AMLO-Morena podría hacer ganar casi a quien sea en 2024. Pero no es aconsejable dilapidar las ventajas abismales candidateando a una vaca, o exponiendo a un vendaval de riesgos a la ungida Claudia Sheinbaum, no hay que tentar a la fortuna ni menospreciar a los adversarios y al electorado. La mancha del Metro no se la va a quitar Claudia ni con toda el agua del océano, ni con la Guardia Nacional, ni abriendo juicio a personas humildes como la señora acusada de sabotaje porque se le cayeron las aspas de su lavadora a las vías del Metro (acto indigno de un gobierno popular). Lo mejor para el proyecto de Claudia, desde el punto de vista de la estrategia, sería aceptar todas las culpas del Metro, abandonar la tontería del sabotaje (aunque sea verídico), y confiar que el posicionamiento de AMLO alcanzará para ganar las elecciones del 2024. Apelar a la memoria corta, a que la popularidad de AMLO haga que la gente perdone sus culpas la haga Presidenta. Tratar de ganar la batalla en y desde el Metro, lo más que le depara es una victoria pírrica, una especie de Stalingrado.
COLOFÓN. Julio César, una vez que tomó Roma, aceptó que la batalla final de la guerra civil fuera en Asia, como querían sus adversarios: ganó aplastantemente, porque era Julio César. Pancho Villa aceptó que la batalla final de la Revolución fuera en los llanos de Celaya: perdió porque al final, Obregón fue mejor general que él. Veremos si #EsClaudia, sabe sacar la batalla sucesoria de las trincheras Metro, o se hunde ahí. Eso sí, se hundiría ella sola, porque AMLO, en ese escenario, escogería otro delfín: para lo que se ofrezca, Adán ya está acumulando a la velocidad de la luz apoyos y más apoyos públicos de gente famosa.
Padre descubre a su hijo robando y lo entrega a la policía (nota de Laura Vázquez en Quinto Poder)
El hombre entregó a su hijo a la policía después de haberse percatado que robó una licuadora. Laura Vázquez / Quinto Poder La determinación de un padre se ha vuelto viral en redes sociales, luego de darle una gran lección a su hijo con la esperanza de que retome el camino correcto y es que el…
¿De qué murió Xavier López Chabelo? (nota de Laura Vázquez en Quinto Poder)
Te contamos todo lo que sabemos sobre el fallecimiento del actor y conductor mexicano. Laura Vázquez / Quinto Poder Este 25 de marzo se dio a conocer el sensible fallecimiento del actor y conductor Xavier López Chabelo, quien durante décadas se ganó el cariño del público mexicano, pero ¿cuáles fueron las causas de su muerte? Aquí te lo…
Si en verdad, como así parece, es sabotaje, Claudia no se puede dar el lujo de no responder, tiene que agotar la investigación de todas las posibilidades, de las cuáles, por el timing y la frequencia, el sabotaje es la más plausible de todas.
En cuanto a que la oposición no es cápaz de estar tras estos sabotajes, no se debe olvidar que PRI-PRD controlan, mafiosamente el sindicato, el cuál es el sospechoso con mayor posibilidad de ser culpable de este sabotaje, en esta sospecha si se quiere meter a un aliado morenista dentro de los saboteadores, el monrealismo sabe como hacer oposición sucia interna.