Visitantes denuncian que Parque Aztlán desata caos vehicular (nota de Dana Estrada en OEM-Informex)

Visitantes estacionan sus automóviles en circuitos y ciclovías

Dana Estrada / OEM-Informex

Ciclistas y visitantes de la Segunda Sección del Bosque de Chapultepec denunciaron el fin de semana que los circuitos y ciclovías colindantes al nuevo parque de diversiones Aztlán se convirtieron en estacionamientos públicos, pese a estar prohibido.

De acuerdo con imágenes de las denuncias ciudadanas, se observaron filas de decenas de automóviles aparcados frente a discos con las leyendas “no estacionarse” y en carriles de tránsito vehicular o ciclista, ubicados metros adelante de la nueva feria, entre el parque infantil La Tapatía, el club ciclista, y el circuito entre el Bistró Chapultepec y el Parque Washington.

“Toda la semana pasada, desde que empezaron las vacaciones, estuvo muy lleno. El sábado y el domingo hubo mucho tráfico y muchos se estacionaron para no pagar o porque se llenaron los de aquí enfrente” relató Gustavo, vendedor de dulces frente a Aztlán.

El estacionamiento privado más próximo al parque recién inaugurado es el E4, este se ubica frente al primer acceso y tiene un costo de 56 pesos por un horario ilimitado; sin embargo, estuvo saturado ya que tiene capacidad para menos de 100 coches, al igual que el E5, el cual se encuentra al lado del jardín infantil La Tapatía.

Por ello los automovilistas decidieron permanecer en espacios prohibidos, a pesar de que la Segunda Sección cuenta con siete estacionamientos.

A unos días de iniciada esta práctica, policías de tránsito de la Secretaría de Seguridad Ciudadana capitalina (SSC) han mantenido recorridos para evitar que el espacio destinado a deportistas o tránsito vehicular continúe ocupado.

Y aunque las vacaciones de estudiantes del nivel básico están por concluir, el tráfico en la zona sigue causando algunos embotellamientos y saturación en los estacionamientos E4 y E5.

“Vengo en bici o a correr dos o tres veces por semana. Ahorita es complicado pasar por la pista porque están los coches que vienen a la feria. Unos sí se fijan que uno va pasando pero muchos no, sólo hay un policía en la entrada (de Aztlán) que da el paso a los peatones, pero más adelante no hay nada más”, comentó el usuario Mauricio.

ESTE CONTENIDO ES PUBLICADO POR julioastillero.com CON AUTORIZACIÓN EXPRESA DE OEM-INFORMEX. Prohibida su reproducción.