Y en verdad, la falta de inspiraciones y de aspiraciones sociales en el progreso del desarrollo tecnológico, científico y educativo, siempre causará un impacto perennemente nocivo en la sociedad. En especial, a la clases pobres y media trabajadora. No a la clase de la nata política, que viven como reyes de este mundo. Mientras que el pueblo bueno, sufre su hambre y desesperanza total. Además, el estudio realizado de proyección, muestra la existencia de un fenómeno doloso social que consiste cuando el mismo “pueblo” asalta, secuestra y violenta a su mismo “pueblo bueno”. Este fenómeno social, sustentado con los datos reales; comprueba la falta de inspiraciones y de aspiraciones. Inclusive, muestra una tendencia de mayor incertidumbre en las proyecciones de bienestar futura para estos próximos años en nuestra sociedad, y esto es lo preocupante.
Pero esto no es todo. En relación al estudio y análisis de ciencia de datos, las proyecciones sociales muestran nubarrones oscuros. Por un lado, la falta de desarrollo tecnológico e impulso científico, forja una brecha abismal con respecto a la competitividad internacional. Es decir, a la falta de estrategias e implementación concernientes al conocimiento tecnológico y científico, entonces no habrá empleos bien remunerados. Es más, se confirma que la fuerza productiva actual será substituida tarde o temprano por sistemas autónomos y robóticos, reduciendo dramáticamente las oportunidades de trabajo laboral.
En el ámbito de la educación ni que decir. Las nuevas generaciones quedarán obsoletas, si no están al día en la información científica y tecnológica al último nivel mediante el sistema de educación digital competitiva. Si ambos argumentos se combinan, entonces el resultado es un efecto negativo acelerado que impactará las proyecciones empresariales, económicas y sociales, y esto no es aceptable.
La pregunta es: ¿cómo disminuir el daño nocivo ya presente? Lo que se sabe del estudio divirtualigente de este comportamiento, es que esta tendencia negativa, se comporta como una función negativa exponencial acelerada e invisible a los ojos, pero presente por sus efectos en la dimensión social. Es decir, existen una dimensión presente y una invisible. Es como el efecto de la fuerza de gravedad. Se ve como se caen las cosas al suelo por la gravedad, pero no se visualiza las fuerzas que lo accionan. Lo mismo sucede en el fenómeno del pueblo que roba, secuestra y mata a su pueblo. Se ve el impacto en esta dimensión social, pero no se visualiza completamente -oscuridad- las causas de sus orígenes.
De nuevo, la tecnología muestra claramente las diferentes dimensiones visibles o invisibles existentes en las estrategias e impactos relacionados con las proyecciones empresariales, económicas, políticas y sociales. Descubre las dimensiones oscuras y divinas. Inclusive remueve aquellas ideas y artificios de reinados oscuros. Fomenta los dones del conocimiento y sabiduría, educación tecnológica y digital divina en beneficio de la sociedad. Reduce el impacto negativo acelerado exponencial de forma inmediata. Acelera las inspiraciones y aspiraciones a pesar de todo. Sirve y no se sirve creando súbditos. Genera bienestar social actual y futura consistente, y esto es lo increíble.
Octavio Fernández, PhD.
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