Captan a delegados del sindicato Miguel Trujillo López alterando urnas y rompiendo boletas en la legitimación de contrato colectivo de trabajo; trabajadores se imponen e insisten en nueva representación sindical.
Alonso Merino Lubetzky | POPLab.
La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) suspendió las votaciones para legitimar el contrato colectivo de trabajado en la planta de General Motors Silao y presentó una denuncia penal, luego de registrar la destrucción de boletas dentro de oficinas gremiales y de la negativa del sindicato Miguel Trujillo López de entregar a las autoridades federales el material electoral ya sufragado por los obreros.
Trabajadores y trabajadoras de GM denuncian, además, el robo de urnas y boletas desde el 20 de abril, así como la introducción de paquetes enteros con votos a favor de la ratificación del contrato colectivo durante la madrugada del 22 de abril, en las últimas horas de votación y pese a una oposición mayoritaria a la permanencia del sindicato de Tereso Medina Ramírez, su secretario general.
El sindicato cetemista ha dicho que no pudo concretar las votaciones debido a que la autoridad no encontró “garantías de certeza y seguridad” en el proceso. Aún así, informó que presentó una denuncia de hechos ante el Ministerio Público, siendo atendidos por la fiscal Laura Denisse Gutiérrez Flores cuya denuncia quedó registrada en la carpeta de investigación 40780/2021.
La STPS, por su parte, también comunicó haber interpuesto una denuncia penal ante la Fiscalía General del Estado de Guanajuato para que se deslinden responsabilidades. “Estos lamentables sucesos representan una grave vulneración al derecho de las y los trabajadores a decidir libremente si respaldan o no el contenido de sus contratos colectivos”, dice un comunicado.
“Sí, se cancelaron las votaciones y se llevaron a algunos del sindicato a hablar a una oficina. No sé si sea cierto que vieron al “Flaco” con unas urnas, pero al parecer las urnas de las votaciones de antier se extraviaron y por comentarios que se escuchan dicen que no es justo: que nos están quitando el derecho a elegir al que nosotros queríamos”, expuso un trabajador en una denuncia que recibieron miembros del Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical (CILAS) A.C. y de Generando Movimiento.
El fraude del sindicato Miguel Trujillo López se da en el marco del proceso de legitimación de contratos colectivos de trabajo en todos los centros de trabajo del país como parte de las obligaciones del nuevo Tratado de libre comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y la reforma laboral del 1 de mayo de 2019, cuyo objetivo es la eliminación de los contratos de protección y el sindicalismo blanco.
Trabajadores dicen NO al sindicato de protección
De 6 mil 494 trabajadores agremiados que fueron registrados ante la STPS por el sindicato Miguel Trujillo López para la consulta, solo 3 mil 435 “participaron sin incidentes” en las votaciones del día 20 de abril, según informó la STPS.
Pero la historia fue otra en la jornada del 21 al 22 de abril, cuando los obreros denunciaron la mayor cantidad de anomalías, “pues fue cuando los delegados se encerraron en el local sindical para romper las boletas que se armó la revuelta”, de acuerdo con el testimonio de Patricia Juan Pineda, abogada del CILAS, quien acudió a General Motors durante el último día de votaciones.
“Lo más interesante fue cómo los trabajadores, las trabajadoras, se organizaron, se coordinaron para informarse y decir NO, y que es obvio que la empresa y el sindicato saben que están perdiendo. Que ya perdieron, que ya la gente está diciendo basta y que en ese contexto se confabularon para evitar el proceso de votación”, explicó Patricia Juan.
Las denuncias de hostigamiento, acoso e injerencia por parte de la empresa acompañaron toda la noche del 21 de abril. Las y los trabajadores denunciaron que los supervisores de línea de producción los amenazaron para que votaran a favor del sindicato, incluso algunos de ellos recibieron ofrecimientos de vender su voto a cambio de 200 pesos, y otros más fueron despedidos durante las votaciones.
También señalan a la supervisora de Recursos Humanos de la empresa, Dora Luz Lara Navarro, de seleccionar solo a algunos trabajadores para que fueran a emitir sus votos.
En la mañana del 22 de abril una veintena de trabajadores acudió a las oficinas del sindicato para preguntar por los motivos de la suspensión de la consulta y las oficinas del sindicato estaban cerradas. “Eso es lo que está pasando aquí en General Motors. No hay gente en las oficinas del sindicato, están solas”, denunció un trabajador en comunicación personal con Israel Cervantes de Generando Movimiento.
Más obstrucciones a visores
Patricia Juan Pineda, también integrante del grupo de abogados Litigio Estratégico en Derechos Humanos Laborales y asesora laboralista de Generando Movimiento, fue testigo de las anomalías en el proceso de consulta, pues a pesar de haber sido acreditada por la STPS para presenciar las votaciones como visora, la empresa impidió su ingreso durante la noche del 21 de abril.
La obstrucción del paso a observadores se registró también en la primera jornada de votación el día 20 de abril, cuando miembros del CILAS A.C. y de POPLab fuimos expulsados de las instalaciones del Complejo Silao.
“Ya estaba todo listo para que yo ingresara y al cuarto para las 10:00 pm que yo me paré en la puerta para ingresar. Me tuvieron ahí hasta las 10:30 pm y me informaron que no me permitía el ingreso a la empresa. Que la empresa se negaba rotundamente a que yo entrara a sus instalaciones”, declaró Patricia Juan a POPLab.
La negación de GM a admitir a los observadores acreditados fue confirmada por Diego Alberto Gatica Noriega, Coordinador General de Verificación del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL), y Mario Antonio Godínez García, inspector federal del trabajo, de la delegación en Guanajuato de la STPS.
“Lo que tenemos claro es que ya nos habían dicho que era muy complicado que me dejaran entrar porque Tereso Medina ya había dicho que no quería a nadie, que ya tenía mucha vigilancia. Están furiosos los de la CTM”, explica Patricia. Willy Gómez, también visor acreditado, informó que ante la prohibición del acceso “los inspectores de la STPS levantaron un acta” de lo sucedido.
STPS reporta inspectores que nadie vio
De acuerdo con el comunicado de la Secretaría del Trabajo, la ratificación del contrato colectivo de trabajo en GM Silao tuvo la presencia de 16 inspectores del trabajo así como de 7 observadores, tanto de la STPS, como del CFCRL y la Subsecretaría del Trabajo y Previsión Social del Estado de Guanajuato.
Sin embargo, POPLab acudió a la delegación de la STPS en Guanajuato y no le fue entregada información alguna de los inspectores que estuvieron presentes en la consulta. Solo se informó que la encargada de despacho Araceli Rodríguez Colmenero no estaba en la oficina porque “hace home office“. Los únicos dos inspectores, Gatica Noriega y Godínez García, fueron vistos por miembros del CILAS durante las últimas horas de votación antes de que fuera suspendida.
A decir de Patricia Juan, “es claro que las empresas y los sindicatos están haciendo las legitimaciones, donde no hay vigilancia federal y han estado haciéndose con notarios, que es lo que ha pasado en su mayoría”. Dijo además que la mayoría de las legitimaciones están siguiendo el esquema de General Motors: “mal informan a los trabajadores, los amenazan y llevan una votación limpia porque los obligan a votar por lo que les dicen. Y así se están legitimando los contratos”, afirmó.
