En agosto, el INPP cayó, siendo este el primer decrecimiento registrado desde noviembre del 2020
Diego Aguilar | OEM-Informex
El Índice Nacional de Precios al Productor (INPP) registró una ligera caída durante el mes de agosto y rompió una racha de 20 meses al alza, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
De acuerdo con el indicador, en agosto del 2022 el INPP cayó 0.36 por ciento, siendo este el primer decrecimiento registrado desde noviembre del 2020.
El instituto de estadísticas señaló que a tasa mensual y por grupos de actividades económicas, los precios de las actividades primarias y terciarias descendieron 0.08 por ciento y los de las actividades secundarias, 0.51 por ciento.
Para la subdirectora de Grupo Financiero Monex, Janeth Quiroz, la mencionada disminución implica que los productores están enfrentando menores costos, lo que podría incidir directamente en los precios al consumidor, es decir: la inflación.
Por su parte, la directora de Análisis Económico de Banco BASE, Gabriela Siller, señaló que la caída en los precios del petróleo también influyó en que el costo de la producción descendiera.
Concamin externa preocupación por robo de alimentos
La Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (Concamin) así como sus afiliados afectados, externaron su preocupación que las industrias alimenticias de México han compartido a la sociedad mexicana y a las autoridades responsables de “cuidarnos a todos”.
A través de un comunicado, la confederación señaló que en los últimos meses se han dado diversos hechos de violencia, robo y control de la comercialización de los alimentos básicos.
“Hechos que lastiman y que afectan a la población en general, son los acontecidos recientemente en diversos estados del país”, indicó la Concamin.
Añadió que para la industria confederada y las industrias de alimentos, es inadmisible que algunos estados estén pasando por esta complicada situación, con la que se pone en riesgo la seguridad alimentaria, el abasto, y se encarecen los alimentos en esas poblaciones.
De acuerdo con la Concamin, esto afecta en mayor medida a los que menos tienen, incluyendo a comunidades marginadas que están a merced de la delincuencia organizada, que controla los accesos a esas poblaciones, amenaza a los proveedores de insumos y alimentos, controla los precios y el abasto, dejando sin transporte a la cadena de suministro al robar, quemar o destruir los camiones que surten esas regiones.
