La desigualdad económica afecta principalmente a las mujeres de escasos recursos y grupos marginados de la sociedad
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CDMX. Las dos mil 153 personas cuya fortuna se estima en más de mil millones de dólares en el mundo acumulan más dinero que cuatro mil 600 millones de personas, cifras de desigualdad que afectan particularmente a las mujeres y niñas pertenecientes a grupos pobres y marginados, advierte Oxfam.
La organización presentó el documento Tiempo para el cuidado: El trabajo de cuidados y la crisis global de desigualdad en el contexto del Foro Económico Mundial de Davos (WEF), en Suiza, que comenzó este lunes.
El encuentro anual reúne a la “élite mundial”, e incluye a los políticos y empresarios más importantes del mundo.
De acuerdo con los organizadores, tiene el objetivo de mejorar el estado de la humanidad.
Este año, el WEF cumple medio siglo y entre los asistentes destacan la ambientalista Greta Thunberg, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y Dara Khosrowshahi, CEO de Uber.
El estudio señala que la desigualdad afecta particularmente a las mujeres y niñas de grupos marginales. Cada día dedican 12 mil 500 millones de horas gratuitas al cuidado de niños y adultos mayores.
“Su trabajo es esencial para nuestras comunidades. Es la base de familias prósperas y una fuerza laboral saludable y productiva”, detalló el estudio.
El trabajo no remunerado de mujeres y niñas está valorado en 10.8 billones de dólares anuales, lo que representa tres veces el tamaño del sector de la tecnología.
“Esta cifra, aunque enorme, representa una subestimación. Sin embargo, la mayoría de los beneficios financieros corresponde a los más ricos, y casi todos son hombres”.
La institución que engloba a 17 Organizaciones No Gubernamentales del mundo detalló que existen muchos factores de riesgo que pueden “empeorar mucho” la situación actual de la desigualdad.
“Las poblaciones envejeciendo, los recortes en presupuestos públicos y el cambio climático amenazan la exacerbación de la inequidad económica y de género, así como alimentan una espiral de crisis en el cuidado y los cuidadores”.
SIN ACCIONES
En el estudio, Oxfam acusa a los líderes mundiales de no tener una planificación que permita reducir la desigualdad.
“A pesar de los estudios de la brecha entre riqueza y pobreza, y la evidencia de sus efectos corrosivos, la mayoría de los líderes mundiales todavía persigue agendas políticas que llevan a una brecha más grande”.
Oxfam acusó a líderes como el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, o su homólogo brasileño, Jair Bolsonaro, por medidas como recortes de impuestos a los multimillonarios, obstruir el combate al cambio climático, fomentar el racismo, el sexismo y el odio a las minorías.
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