Roberto Álvarez/ OEM-Informex
CHIHUAHUA. Como sucede en el parque el Chamizal en Ciudad Juárez, un grupos de inmigrantes flotantes decidieron asentarse en las instalaciones del Palomar para utilizarlo como refugio, por lo que ahora viven junto a los indigentes y personas con problemas de drogadicción que prevalecen en el espacio público.
Alrededor de 100 personas, entre inmigrantes, indigentes y malvivientes pernoctan durante las noches en el parque, pero comienzan a adueñarse de El Palomar a partir de las 6 de la tarde, y en muchas ocasiones causan molestias a los transeúntes o a quienes deciden utilizar el parque para alguna actividad recreativa.
En el caso de los inmigrantes se sabe que buscan refugiarse del frio ya que la mayoría provienen de países cálidos y no están acostumbrados a las bajas temperaturas que azotan a la entidad.
Sin embargo la mayoría de ellos al no tener a servicios básicos optan por utilizar algunos espacios del parque como baño, dejando tras su paso desechos humanos, lo cual crea un foco constante de infecciones y contaminación.
El director de Mantenimiento Urbano, Federico Muruato reconoció que el problema de los indigentes en el parque El Palomar está en aumento, pero dijo que se debe en gran medida a que decenas de inmigrantes buscan refugiarse en dicho espacio público.
En cuanto a las grietas que presentan las esculturas de las Palomas explicó que en próximos días realizarán obras de mantenimiento a las obras debido a que tienen una falla de origen, pero aun así aseveró que no hay riesgo de que se puedan desprender.
El funcionario Municipal dijo que ambas problemáticas que están atendiendo desde la semana pasada, la primera de ellas, que tiene que ver con los inmigrantes que se alojan en el parque, en la que se acordó con la Dirección de Seguridad Pública Municipal realizar operativos o rondines por parte del Grupo Beta para evitar las molestias a los transeúntes.
En cuanto a las esculturas de Las Palomas expresó que efectivamente le corresponde al Ayuntamiento el mantenimiento de las mismas, las cuales dijeron que desde que se hicieron se les ha tenido que dar mantenimiento hasta dos veces por año.
El mantenimiento consta en aplicar una soldadura de bronce en todas las grietas que se presentan por el gran peso de las esculturas, las cuales descartó estén a punto de caerse o desprenderse.
Sin embargo dijo que constantemente están inspeccionándolas para evitar cualquier fractura en las grandes estructuras, cuyo peso es el principal factor de que se agrieten constantemente, principalmente en la base de las mismas.
Al retomar el caso de los inmigrantes, dijo que tanto ellos como los indigentes optan por refugiarse del frio en algunos espacios de El Palomar, por lo que también significa una carga doble en cuanto al mantenimiento ya que dejan basura y desperdicios.
Reiteró que desde la semana pasada la DSPM comenzó a retomar los operativos y rondines en la zona, reconociendo que hay problemas constantes debido a que también utilizan el parque para realizar sus necesidades fisiológicas entre otras cosas.
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