Herederos de ayer y de hoy. Autor: Federico Anaya Gallardo

Te pido paciencia lectora y que me acompañes otra vez a la vieja república romana. El año es 107 aC y Cayo Mario, un plebeyo de orígenes humildes se presenta a la elección de cónsul. Tiene una carrera brillante, pero sus competidores son de familias ricas, patricias y muy antiguas. En uno de sus discursos, el candidato Mario declaró: “A otros, si delinquen, los protegen su antigua nobleza, los brillantes hechos de sus mayores, las riquezas de sus parientes y allegados así como la multitud de sus clientes. Yo en cambio, sólo en mí mismo encuentro mis esperanzas. Por eso tengo que defenderlas a fuerza de valor e integridad. Todo lo demás es endeble.” (Sigo al historiador Salustio en su Guerra de Yugurta.)

Cayo Mario agregó: “Desde mi infancia hasta la edad presente me he conducido de modo tal que todos los trabajos y peligros me sean habituales.” Sobre sus oponentes aristocráticos, dijo: “ellos desprecian mi falta de nobleza, yo su incapacidad. A mí se me echa en cara mi baja condición, y a ellos sus maldades.” Y terminaba con este duro juicio diciendo que los nobles, “corrompidos por la soberbia, viven como si despreciaran vuestros honores [de la ciudadanía], pero los solicitan [en las elecciones] como si viviesen honestamente”.

¿Te fijas, lectora, que realmente no hay nada nuevo bajo el sol? En la permanente lucha de clases, los candidatos plebeyos lo deben todo a su autenticidad y los candidatos patricios, una vez tras otra, demuestran su perfidia, su hipocresía y el abuso del poder acumulado por sus ancestros. En este espacio, he sugerido que esto se debe –al menos en parte– a ese egoísmo que se nos inculca a todos en la intimidad de la familia: a ese mal hado que nos aconseja beneficiar a nuestros hijos e hijas ignorando a todos los demás. La solución sería criar a nuestros retoños en el respeto a la dignidad de todos (y todas) y construir comunidad política más allá de las familias. Pero esta solución es despreciada por los que ya se han acomodado. Ellos y ellas simplemente ven prosperar a sus hijos e hijas sobre la base de la desigualdad.

Demos un salto de veintiún siglos y regresemos a nuestro México.

El miércoles 3 de abril de 2024, el comentarista “Callo de Hacha” transmitió y logró hacer viral un video de poco más de cinco minutos en el cual se observa al hijo de la candidata Xóchitl Gálvez Ruiz en estado de ebriedad insultando a meseros y empleados de un restorán porque no lo dejaban entrar. (Liga 1.) Una de las cosas que más indignó era la prepotencia del junior, que llamaba “gatos” a quienes sólo cumplían su deber.

En este caso, la indignación social (de todas y todos) se sumó a la conveniencia política (del polo conservador en la elección) y Juan Pablo Sánchez Gálvez renunció al cargo que su madre le había dado dentro de su campaña presidencial. Más adelante se supo que el video del escándalo no era tan reciente. En el video en que se disculpa y renuncia a su cargo, Sánchez Gálvez señaló que el incidente había ocurrido “hace un año” y que “en su momento [se] disculp[ó]” con el personal “del antro” subrayando que “ellos lo saben”. (Liga 2.)

En este caso, como en el que comenté la semana pasada (Neto Coppel vs la Banda Sinaloense), la Opinión Pública ganó la batalla casi de modo inmediato. Sin embargo, el asunto merece un poco más de reflexión.

En otra ocasión he señalado que la aristocracia mexicana asume que sus desafueros y faltas pueden quedarse en el ámbito privado y que, en nuestra sociedad de clases, los poderosos suelen hacer lo que quieren. Pongamos un ejemplo. En junio de 2017 juniors de dos colegios de los Legionarios de Cristo protagonizaron una riña en Santa Fe, Ciudad de México. Varios muchachos terminaron en el hospital con lesiones. En los primeros reportes se dijo que habían participado escoltas de alguno o algunos de ellos. En menos de quince días, El Financiero reportaba que “las familias de los cinco jóvenes que resultaron lesionados en la pelea entre estudiantes del Instituto Irlandés y el Colegio Cumbres durante una fiesta de graduación llegaron a un arreglo para no presentar denuncias penales por los golpes; cada quien solventará los gastos médicos, así como que pondrán un castigo ejemplar a sus hijos…” (Liga 2.)

El analista Roberto Morris (n.1979) comentó: “Si hubieran hecho lo mismo en un partido de futbol serían hooligans. Si la misma situación se hubiese dado en Tepito, serían pandilleros. En ambos casos nadie se hubiera tocado el corazón y hubieran acabado frente al Ministerio Público ya que ellos no tienen abogados que armen conciliaciones.” Esto lo afirmó Morris en su artículo “Irlandés vs Cumbres Episodio II: La Legión Contraataca”, publicado por el Huffington Post el viernes 23 de junio de 2017, que ya no está disponible en la red –pero que guardé en el tiempo de su publicación.En este artículo de Morris nos enteramos que el arreglo privado de la riña lo había anunciado Jorge Ricardo García-Villalobos Haddad (n.1968) y en ese entonces presidente del Consejo Nacional de la Abogacía (Conabogacía, ver su página www en Liga 4).

En el mundo de las y los humanos nada es coincidencia. Si googleas a García Villalobos Haddad, encontrarás que el portal www de Líderes Mexicanos (Liga 5) lo describe como “parte de la tercera generación de abogados en su familia”. Efectivamente, él sería el tercero de los Ricardos García-Villalobos. El primero fue García-Villalobos Espinoza (1904-1988): abogado fiscalista, magistrado del Tribunal Fiscal de la Federación, miembro de la Junta de Gobierno de la UNAM. El segundo fue García-Villalobos Gálvez (1945-2012): delegado de Iztapalapa en la Regencia Hank González, director general de Servicios Migratorios y Subsecretario de Gobierno en la Segob, magistrado presidente del Tribunal Superior Agrario.

¿Qué distingue a los tres García-Villalobos? Veamos sus hechos y gestas. En la elegía que escribió Fernando Flores García sobre Ricardo I al tiempo de su muerte, en el número 160-161-162 de la Revista de la Facultad de Derecho publicado en julio-diciembre de 1988 (Liga 6), leemos que cuando Ricardo I fue director de la Facultad de Derecho de la UNAM enfrentó “graves movimientos provocados por agentes ajenos a nuestra Casa de Estudios” (p.442).

De Ricardo II lo sabemos parte del equipo de Carlos Hank González en los 1970 y a mí me tocó conocerle como uno de los tres subsecretarios de Gobernación que, en 1995, amenazaron con expulsar del país a una docena de agentes de pastoral extranjeros de la diócesis católica de San Cristóbal de Las Casas acusados de fomentar la rebelión zapatista.

Ya vimos que Ricardo III “arregló en privado” el caso de los juniors de los colegios legionarios, pero para mejor retrato del tercero de los García-Villalobos, conviene leer la nota del 25 de mayo de 2018 publicada por La Razón adonde se reportó que miembros del consejo nacional de Conabogacía “se pronunciaron en contra de las conductas delictivas de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC), que encabezaba Nestora Salgado”. (Liga 7)

En 2018, Conabogacía señaló a La Razón que Nestora había cometido delitos y que sus procesos penales estaban abiertos –pese a que para ese momento ya había sido liberada por sentencias de primera instancia en Guerrero. García-Villalobos Haddad criticó los procedimientos de justicia comunitaria aplicados por la CRAC-PC, mientras que otro consejero de Conabogacía, Iñaki Blanco (sí, lectora, el exfiscal general de Justicia de Guerrero que entorpeció la investigación original del Caso Ayotzinapa) señaló que él había ordenado –como cabeza del Ministerio Público guerrerense– apelar las sentencias favorables a Nestora. (La nota era parte de la campaña electoral, buscando evitar que Nestora llegase al Senado. Fracasaron.)

No podemos negar la consistencia ideológica a derechas de los García-Villalobos. Por más de medio siglo, los tres han sido gente “institucional” que defiende al “Estado de Derecho” en contra de agentes ajenos, de críticos o revolucionarios y en general, de cualquier mecanismo alterno de solución de conflictos que no esté controlado por las élites.

Frente a las tres generaciones de García-Villalobos, el caso del junior de Xóchitl Gálvez Ruiz es… patético por diminuto. De entrada, este young-adult (que no menor de edad, que no joven) es apenas segunda generación de una familia metida a la política. Reconozcamos que uno de los atractivos de Xóchitl Gálvez Ruiz es que ella proviene de los estratos inferiores de la sociedad. Por eso es que la derecha puede presentarla como un caso de éxito y superación social.

Pero precisamente por eso es más grave que su hijo se comporte como junior, actúe irresponsablemente y denigre a sus conciudadanos –esos a los que hoy su madre pide el voto. Ya lo decía Cayo Mario hace 2,131 años: “Corrompidos por la soberbia, [los aristócratas] viven como si despreciaran vuestros honores [de la ciudadanía], pero los solicitan [en las elecciones] como si viviesen honestamente”.

Esto nos muestra que la socialización dentro de las conductas típicas de las élites opresoras es mucho más rápida y fuerte de lo que habríamos podido imaginar. Otro ejemplo que viene a la mente es el de aquel hijo brillante de marxistas comprometidos que, una vez en el poder, terminó reproduciendo en el INE el más vil clasismo ante los indígenas mexicanos.

Los casos de Juan Pablo Sánchez Gálvez y de Lorenzo Córdova Vianello me recuerdan el dicho popular novohispano que rezaba: Padre conquistador, hijo noble, nieto pordiosero… Si la primera generación triunfa y se acomoda, la segunda disfruta hasta el abuso y la tercera muestra la decadencia. Lo triste es que este adagio es iluso. Las élites se aseguran que los hijos nobles sean protegidos y que sus abusos no tengan consecuencia. Por eso Juan Pablo insistía en que él ya había pedido disculpas por las ofensas de hace un año –en privado, tal y como Ricardo III García-Villalobos aseguró que los juniors de los colegios legionarios arreglasen en privado lo que eran delitos contra el orden público.

¡Las élites todo lo privatizan!

Ligas usadas en este texto:

Liga 1:
https://www.infobae.com/mexico/2024/04/03/exhiben-a-hijo-de-xochitl-galvez-golpeando-a-trabajadores-de-antro-en-polanco-pinches-gatos-video/

Liga 2:
https://www.facebook.com/watch/live/?ref=watch_permalink&v=361774259511096

Liga 3:
https://www.elfinanciero.com.mx/nacional/padres-acuerdan-castigo-ejemplar-a-implicados-en-pelea-cumbres-irlandes/

Liga 4:
https://www.conabogacia.com/nosotros

Liga 5:
https://lideresmexicanos.com/tag/jorge-garcia-villalobos-haddad/

Liga 6:
http://historico.juridicas.unam.mx/publica/librev/rev/facdermx/cont/160/nec/nec18.pdf

Liga 7:
https://www.razon.com.mx/mexico/acusan-abogados-a-nestora-por-detenciones-de-menores-y-abusos-a-mujeres/

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